El cuerpo de una mujer y sus curvas... Las gotitas de agua deslizándose lentamente por su piel, sus manos acariciando su cuerpo. Las sesiones boudoir son un verdadero reto porque nos gusta la sutileza, el erotismo, la sensualidad sin dejarnos caer en lo vanal de un simple cuerpo desnudo.
Con Natasha y su disciplina de baile juntamos todos los requisitos para que la ducha fuera un lugar para disfrutar, para hacer volar la imaginación, para jugar con la luz, el agua, su pelo...
A nosotros nos encantó su disposición para poner a prueba su flexibilidad y la manera en la que salió airosa de todas las posturas.
Quieres una sesión entre agua? Si te apetece, ponte en contacto con nosotros y podremos captar otro punto de vista de ti mism@