Esther ya es casi de la familia! Primero fue una sesión en pareja y ahora quería algo solo para ella.
La lencería y actitud apropiada nos bastaron para poder sacar el máximo de su apartamento. Sólo puedo deciros que a pesar de que el espacio que teníamos para trabajar no ayudaba, todos sabíamos que podríamos aprovecharlos bien.
Y vaya que SI!
Estas fueron en el salón, un gran ventanal, el sofá y con nuestra protagonista totalmente comprometida y cómoda delante de nuestra cámara, el resultado estaba cantado. Fue un BINGO!
En breve os enseñaremos otros estilos y look (juego de luces coloreandolo todo, en la ducha y sin agua, en la cama con cadenas...) Seguro que disfrutáis como nosotros